Heidy Valeria de tan sólo 2 años, murió luego de comerse una galleta envenenada con la que pretendían matar a su perro por ladrar mucho.
La niña se encontraba jugando con una vecina, en su casa ubicada en la colonia Teodosio R. Guevara, en el municipio de Tototlán, Jalisco.
Las niñas tomaron una galleta que había sido arrojada al patio y se la comieron; minutos después ambas niñas empezaron a sentirse mal, por lo que fueron trasladadas a la Unidad Municipal de Protección Civil donde las atendieron bajo los protocolos establecidos en casos de intoxicación.
El hecho ocurrió el 01 de febrero y tras permanecer dos días hospitalizada y sufrir dos paros cardíacos, Heidy Valeria falleció; mientras que su vecina, Naomi de seis años, continúa hospitalizada y reportan su estado como delicado.
El presidente municipal de Tototlán, Juan Carlos Velázquez Coyul, condenó lo sucedido e informó que el caso se encuentra en manos de la Fiscalía del Estado de Jalisco, la cual trabaja para dar con el responsable.