El pasado sábado -14 de agosto-, se registró un terremoto en el sur de Haití de una magnitud de 7,2 grados, el cual hasta el momento ha dejado 2 mil 189 muertos y 12 mil 268 personas heridas.
En tal sentido, mil 832 víctimas mortales eran residentes de la ciudad de Les Cayes, capital del departamento del Sur. Mientras que el resto se reportan en Grand’Anse y Nippes, 218 y 137 respectivamente, y dos más en Noroeste.
Así mismo, se mantienen en calidad de desaparecidos 332 personas, de acuerdo al boletín emitido por Protección Civil.
Por otra parte, 52 mil 953 viviendas fueron destruidas por el movimiento telúrico, mientras que 77 mil 006 sufrieron daños en su infraestructura.
El pueblo de Marigot se encuentra casi destruido, al derrumbarse 500 viviendas de las 615 que existían en ese municipio.
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estima que alrededor de 1 millón 200 mil personas, incluidos 540.000 niños, están afectadas por el terremoto en Haití, teniendo acceso limitado o nulo a servicios básicos.
Además, de acuerdo al Servicio de Protección Civil de Haití, los hospitales luchan por atender a todos los heridos. Sin embargo, tienen deficiencia de médicos, medicamentos y las instalaciones no se dan abasto para atender a los heridos.