Todo proceso público o que involucre a organismos y funcionarios públicos, debe ser transparente, contar con perfiles capacitados para llevar a cabo sus funciones, tener certeza de lo que se está haciendo así como ser capaz de rendir cuentas e incluir a la ciudadanía en sus programas.
Partiendo de ese basamento, entonces, los organismos y funcionarios públicos deberían cumplir con una serie de normas que permitan establecer la transparencia de su trabajo, para así poder comprobar que sus acciones son las adecuadas, sin faltas ni violaciones a las leyes; es por ello que traemos un decálogo que resume de la mejor manera estas designaciones.
Designaciones para organismos y funcionarios públicos
- Acceso a la información: Es necesario difundir la información completa, de manera accesible y oportuna sobre los perfiles y el o los procesos que se estén llevando a cabo.
- Evaluación de los Perfiles: Para evaluar los perfiles, hay que establecer antes cuáles son los criterios y las metodologías para poder evaluar cada perfil.
- Perfil idóneo: Este item y el anterior, van de la mano, pues es necesario establecer las características del perfil ideal, para poder seleccionar al correcto.
- Valoración exhaustiva: Es de suma importancia, que una vez se tenga el perfil idóneo, realizar una valoración minuciosa de los perfiles y sus trayectorias.
- Deliberación Pública: Definir los plazos en que se permiten deliberaciones públicas amplias y con especial seriedad.
- Certeza Jurídica: Cumplir con las etapas y los plazos previamente establecidos.
- Máxima Publicidad: Es necesario que se garantice la máxima publicidad de la información del proceso y de los perfiles.
- Participación Ciudadana: Establecer los mecanismos efectivos para que se de la participación ciudadana durante el proceso.
- Fundamentar las Decisiones: Las decisiones tomadas en el proceso, deben estar bien fundamentadas y tener sentido con lo que se quiere lograr.
- Méritos y Capacidades: Garantizar las designaciones de acuerdo a méritos y capacidades.
