La colonia 3 de mayo es una de las localidades con mayor población en Morelos y su principal área comercial es la cerámica, por lo que se ganó el título de «La tierra de la cerámica».
Está ubicada en el municipio Emiliano Zapata del Estado de Morelos.
Antes de la fundación de la colonia, el 30 de enero de 1961, era simplemente un cerro, según lo que contó Norberta Osorio, comerciante de la zona.
Agregó que, los ejidatarios midieron el terreno y asignaron nombres a las calles para transformar el Cerro Pelón a lo que conocemos hoy en día.
El propietario de Cerámica Teresita, Juan José Villegas, expresó que el trabajo con la cerámica en la 3 de mayo alcanzó reconocimiento a nivel estatal, regional, nacional e internacional.
La cerámica surgió aquí hace 50 años. Con el tiempo los trabajdores adquirieron la habilidad, esa destreza. Aprendieron y abrieron sus propios talleres.
Ambos mercaderes coinciden en que la localidad es un espacio repleto de artesanía y especial para hacer turismo.
Villegas aseguró que están conscientes de que dependen económicamente de los visitantes que adquieren sus productos, por lo que considera importante brindar atención y comodidad a los compradores.
Otra trabajadora de la 3 de mayo, Mónica Muñoz, destacó los avances que se han logrado en el poblado gracias a la unión de la comunidad.
Me apasiona que una comunidad se una, que ame lo que haga, que ame a sus turistas y que siempre esté al tanto de lo que sucede. Ya no somos nada mas un lugar pequeño, nos hemos diversificado y ampliado.
Muñoz mencionó que, en la zona se pueden encontrar restaurantes, muchos servicios, viveros o hasta un sitio lindo para pasar un buen rato.
Osorio, Villegas y Muñoz invitan a la población a visitar la colonia «artesanal y turística», como la apodaron.
Los comerciantes destacan la diversidad en la zona, en donde pueden encontrar todo tipo de artesanía y mucha diversidad que van desde la pintura, resina, porcelana hasta el vidrio y la madera.
Cada pincelada, cada pieza tiene alma. Estamos entregando nuestra alma y nuestro corazón para regalar en otras partes del mundo.
